Si partimos desde la catedral y queremos hacer el recorrido por Mérida tomamos como referencia la plaza de España, continuamos por la calle Santa Eulalia, al final de esta llegaremos hasta el monumento de la niña mártir Eulalia, tras llegar a unos jardines viramos a la izquierda por la Rambla Mártir Santa Eulalia, al final llegamos a la plaza donde se encuentra la Basílica de la niña mártir Santa Eulalia. Desde la basílica tomamos la avenida de Extremadura por la izquierda, tras unos 150 m viramos a la derecha por calle Marquesa de Pinares que nos lleva hasta el acueducto de los Milagros, por un subterráneo pasamos las vías del ferrocarril y viramos a la izquierda hasta el puente romano del río Albarregas, a nuestro derecha el impresionante acueducto, al final del puente encontramos volvemos a toparnos con las flechas amarillas, nos llevarán hasta una glorieta, la tomamos por la izquierda y continuamos por la avenida del Lago que poco a poco nos va alejando de la ciudad.
Cuando llevamos algo más de 6 kilómetros, entramos en una urbanización que nos lleva hasta orillas del Embalse de Proserpina (Km. 7,2 de la etapa). Este lago artificial se utiliza en temporada estival como zona de baño y recreo para vecinos y turistas, ya que cuenta con unos cuantos chiringuitos y un camino perimetral de seis kilómetros de longitud.
Nuestro camino discurre por el margen izquierdo del embalse, este será un momento para disfrutar de uno de los hitos más relevantes de este Camino, la Presa romana de Proserpina. Uno de los tramos más hermosos de la jornada, un legado milenario de leyenda.
Situado a cuatro kilómetros de Mérida. Conocido popularmente como ‘la Charca’, y fue obra de los ingenieros romanos. Se empezó a construir en el siglo I a.C. y acabó siendo el más grande que inauguró el Imperio en los países mediterráneos.
El de Proserpina pasa también por ser el segundo embalse artificial operativo más antiguo del mundo, por detrás del de Quatinah, en Siria. Luce colosal y en un excelente estado de conservación. El dique, de unos 425 metros de largo y 21 metros de profundidad, se organiza en forma de talud escalonado aguas arriba formado por sillares de granito.
El embalse de Proserpina surgió por la importancia que tuvo en la muy excelsa ciudad de Emerita Augusta el suministro de agua, tanto para abastecer a las industrias como para satisfacer las necesidades de sus pobladores.
En el año 1479, en los alrededores del Embalse de Proserpina, se libró la Batalla de la Albuera, que enfrentó a las tropas castellanas de Isabel la Católica contra las fuerzas portuguesas de Juana la Beltraneja, en el marco de la guerra de sucesión por el trono de Castilla.
En la actualidad, este lago artificial se utiliza en temporada estival como zona de baño y recreo para vecinos y turistas, ya que cuenta con unos cuantos chiringuitos y un camino perimetral de seis kilómetros de longitud. (1)
Tras llegar a edificio de la Cruz Roja subimos a la carretera que tenemos a nuestra izquierda (km 8,2 de la etapa). Por esta vieja carretera caminaremos unos 3 km, es muy poco transitada. Transcurridos los 3 km un mojón de granito y algunas flechas amarillas nos avisan de que tenemos que desviemos por una pista de tierra a la izquierda que nos adentra en la Dehesa del Toril. (Km. 11,2 de la etapa).
Este tramo algo abrupto en un principio, pero que pronto se transforma en una pista más cómoda y ondulada que nos lleva hasta una granja porcina (Km. 13,5 de la etapa).
En la granja nos encontramos con buenos ejemplares de cerdos ibéricos que dormitan junto a una charca. Entre las distintas razas porcinas españolas denominadas Tipo Ibérico destaca especialmente la Extremeña Retinta que se remonta en su origen morfológico a tiempos prehistóricos. El ciclo productivo de los cerdos alimentados con bellotas es de tiempos inmemoriales, especialmente en la zona de dehesas dentro de un bosque mediterráneo donde abundan las encinas y los alcornoques. Casi un tercio del área del cerdo ibérico se encuentra en Extremadura.
De cuerpo ad integrum. Se le conoce por infinidad de nombres: cerdo, cochino, guarro, cocho, chancho etc. Dice el refranero popular que del cerdo se aprovecha todo, desde la pezuña hasta el morro; desde su cabeza, preparada en Galicia de manera suculenta, el tierno y suave cochinillo asado de Segovia, sus piernas transformadas en paletillas y jamones, sus rodillas utilizadas para los más exquisitos platos de la cocina teutona, sus entrañas habilitadas para poder hacer chorizos y morcillas, su piel para el célebre chicharrón, etc.
Tras un kilómetro llegamos hasta la población con menos habitantes de Extremadura, El Carrascalejo. Entramos en la pequeña población por la calle Camino de Santiago, en pocos metros llegamos a una bonita plaza con iglesia, la de la Consolación. (km. 14,6 de la etapa).
Su iglesia parroquial pertenece a los siglos XIV y XV, y es de notable interés. El templo está dedicado a Ntra. Sra. de la Consolación, también conocida como iglesia de Sta. María del Camino.
Esta pequeña población tiene albergue para peregrinos, se encuentra a la salida de la población. Una apuesta valiente por parte de su ayuntamiento que ofrece su hospitalidad a todos aquellos peregrinos deseosos de encontrar un lugar de paz y tranquilidad en el camino. Como afirmamos siempre, en la sencillez encontramos los valores fundamentales del Camino y este lugar es una buena muestra de ello.
Camino abajo pasamos junto al albergue de peregrinos, que tiene bar para hacer una parada para tomar un refrigerio sí se desea.
Tras doscientos metros llegamos hasta un crucero construido sobre un ara romana con la Cruz de la Orden de Santiago (Km. 15 de la etapa).
Dejamos atrás la población por una cómoda pista de tierra rodeada de alcornoques, encinas y campos de viñedos. Tras llegar a una pista asfaltada paralela a la A-66, caminamos unos 200 m y giramos a la derecha para entrar por un subterráneo que libra la autovía (Km. 16 de la etapa).
Tras unos trescientos metros en leve ascenso subimos hasta una loma con donde encontramos otra Cruz de Santiago, (Km 16,4 de la etapa). Desde donde se apreciamos la ya muy cercana población de Aljucén. En algo más de 300 m cruzamos la carretera EX-214, tras un paseo arbolado entramos en Aljucén (Km 17,3 de la etapa).
En la plaza se encuentra el bar El Quiosco, en el que podemos sellar la credencial e informarnos del albergue de peregrinos, el de San Andrés.
Llevamos recorridos unos 17 kilómetros, algo menos de la mitad de la etapa. Tenemos que plantearnos si continuar 20 km más hasta Alcuéscar o hacer noche en Aljucén. En cuanto abandonemos esta localidad no encontraremos más servicios hasta Alcuéscar. Si se va a continuar, es aconsejable aprovisionarse bien de agua y de comida.
En la plaza se encuentra el bar El Quiosco, en el que podemos sellar la credencial e informarnos del albergue de peregrinos, el de San Andrés.
Aljucén constituye hoy el centro del amplio valle que surca el río que lleva también su nombre y que nace en la sierra de Montánchez para verter sus aguas en el Guadiana.
Sobre el nombre de Aljucén como pueblo se barajan varias hipótesis. La historia estima que se trata de una población de origen musulmán, debido a que Aljucén significa Castillejo. La teoría está avalada por la existencia cercana de los restos de un antiguo castillo. La segunda hipótesis la avalan sus habitantes, que defienden que Aljucén deriva de junciel, una plata que los lugareños recogían en el río.
Semana Santa, se celebran procesiones desde el Jueves Santo, con imágenes populares de pequeño tamaño.
Fiesta del Emigrante, cada 15 de agosto se reúnen en la Plaza del Parque.
Fiestas Patronales de San Andrés Apóstol, el 30 de noviembre.
Romería de la Confraternidad, se celebra el Domingo de Resurrección entre los tres municipios limítrofes, Aljucén, El Carrascalejo y Mirandilla.
Romería "Fuente de la Peseta", se celebra el primer domingo de mayo en el bonito paraje de la Finca del Coto Vera.
De modestas dimensiones, pero de gran interés. Sus orígenes datan del siglo XVI, su planta es de nave única y con torre fachada delantera en la que se abre una preciosa portada renacentista de elegante diseño. Sobre la misma se despliega, como decoración epigráfica, la siguiente leyenda:
Sant Andrés Apóstol, Ora Pro Nobis. Dominium Deum Nostrum lesuChristum.
Continuamos nuestro camino por la calle de la Iglesia que desemboca en la calle Mayor, salimos de la población por una carretera, tras un kilómetro aproximadamente llegamos a la N-630 (km. 18,8 de la etapa). Por el arcén de la carretera cruzamos el río Aljucén, en menos de 400 m. ante lo que parece una estación de servicio abandonada, nos despedimos del asfalto por un camino a la derecha, que nos lleva a las bellas dehesas de encinas y alcornoques del Parque Natural de Cornalvo.
Avanzamos por una cómoda pista de tierra algo más de kilómetro y medio y nos encontramos con una cruz metálica de Santiago, obra del herrero Casiano Larios (km. 20,9 de la etapa). Un panel informativo nos informa de donde nos encontramos, el Parque de Cornalvo, junto a él, un cubo de granito con azulejo verde nos indica el camino a seguir.
La señalización es buena, pero hay que estar pendiente, hay algunos cruces de caminos que pueden llevarnos a la confusión. Recordemos que, en los cubos indicativos el dibujo del Arco de Cáparra señala el sentido del camino, hay que seguir siempre aquellos que tengan azulejo de color amarillo.
Las Encinas, los alcornoques y algunas reses pueblan esta hermosa dehesa. Un agradable paseo por el parque donde las prisas han de quedar dentro de la mochila.
Tras unos 5 km llegamos al final del Parque Natural, frontera natural entre las provincias de Badajoz y Cacérs. (Km. 26 de la etapa). Un monolito H3 nos informa, junto a él un banco de piedra donde podemos descansar y recuperar el aliento antes de comenzar el siguiente tramo, en ascenso.
Continuamos por un sendero que nos lleva a una pista de tierra, salvo al principio que es un tramo algo escarpado con abundantes piedras, la pista es cómoda. Tras llegar a una cancela entramos en un terreno de bosque bajo y sin apenas arbolado, en días de calor este tramo se hace especialmente duro.
Llegamos hasta la Cruz de San Juan, una cruz de granito (Km. 31,6 de la etapa).
Tras un repecho para coronar el cerro de Las Cañameras, nos aparece a lo lejos Alcuéscar. (Km. 33,7 de la etapa). Las señales nos indican el Camino a Alcuéscar y también la alternativa por el cruce de las Herrerías, una alternativa que podemos tomar cuando el albergue de Alcuéscar está cerrado, en el cruce de las Herrerias se encuentra el Hostal los Olivos.
Para llegar hasta Alcuéscar tomamos el Camino de la derecha, tan solo está a 2 kilómetros. Hay que estar atento a las flechas, una de ellas nos indica un camino que nos lleva hasta el albergue sin pasar por el pueblo, esta alternativa nos ahorra más de 1 km. Por la tarde y ya mas descansados podemos visitar el pueblo (km. 35,9 de la etapa).
Si por el contrario queremo continuar hasta la población tan solo tenemos que continuar recto, una vez en la calle Real continuamos hasta la plaza de España donde se encuentra su ayuntamiento. Una vez en la plaza viramos a la izquierda por la calle Diego Salinas y General Pacheco que nos lleva a coronar la etapa en la iglesia de la Asunción. (km. 37,3).
Situada aproximadamente en el centro de Extremadura, no lejos de la linde con Badajoz, entre dos sierras de nombre fácil de recordar: del Centinela y de la Lombriz.
Fundada en el año 830 por los musulmanes. Esta localidad cacereña se nutre de diferentes culturas, pero si hay un pueblo que la ha marcado ese es el árabe, al que le debe incluso su nombre.
Aunque hay otros puntos de interés, es obvio que sus dos principales monumentos son la basílica Santa Lucía del Trampal y la Iglesia Parroquial de la Asunción. Las Casas Señoriales de la villa o la Ermita del Calvario han presidido durante años la vida y la historia de los habitantes de Alcuéscar.
La Orden de Santiago fue importante en la historia de Alcuéscar. Montánchez y toda su comarca fueron propiedad de la Orden durante muchos años y su castillo residencia de sus caballeros.
Según el fuero que se le dio a Montánchez y su comarca en 1236, se concedió a la Orden de Santiago por razón de conquista la tercera parte de los terrenos del partido; siendo dueños de las dehesas de Zafra, Quebrada, Lechoso, Valverdejo hasta un total de 23 dehesas.
La Orden también tenía una casa llamada tercia, porque en ella guardaban los granos e impuestos que recaudaban. Esta casa creemos que fue la casa llamada de las Castillas, casa muy importante para la Orden; ahí todavía está intacta la mazmorra donde encadenaban a los herejes y malhechores. Debió ser algo así como su cuartel general, como lo indica el escudo de la Orden que tiene en la esquina de su fachada. La máxima autoridad viviría en la plaza frente calle Nemesio Rosco, donde se encuentra el escudo eclesiástico2.
El templo está situado en un paraje a unos 3 kilómetros de Alcuéscar, cerca de Montánchez, en la comarca de Montanchez y Tamuja. Desde Alcuéscar se accede a través de una carretera rural que parte de la calle Fuente del Castaño. Pasados unos 3 kilómetros encontraremos a la derecha el centro de interpretación, que dispone de aparcamiento. Un edificio único por sus peculiares rasgos arquitectónicos y por ser uno de los pocos edificios de la España visigoda que se conservan en la mitad sur de la Península. En su construcción se emplearon materiales procedentes de edificios de época romana y prerromana, por lo que el edificio y su entorno constituyen un verdadero tesoro histórico.
Construida en torno al segundo tercio del siglo VII, está considerada como uno de los mejores ejemplos de la arquitectura hispano-visigoda existentes en toda la Península Ibérica. La tradición habla de esta basílica como Ermita de Santa Lucía, en la época en la que fue parte de un convento de monjes templarios.
Hoy en día aún se pueden apreciar algunos restos de esta antigua construcción. El camino por el que se accede a la basílica de Santa Lucia y al Manantial del Trampal está señalizado desde la Plaza de España y desde la carretera Ex 381/382 que une Alcuéscar y Trujillo.
La iglesia de Santa Lucía había pertenecido al Clero hasta la desamortización de Mendizábal de 1835, momento en que junto con los terrenos circundantes pasó a manos de particulares. A mediados de este siglo el edificio se utilizaba como establo de ganado y cobijo de campesinos.
A pesar de que el edificio siempre ha estado a la vista y era conocido por la gente del lugar fue descubierto, o redescubierto, en 1980 por D. Juan Rosco Madruga y su esposa. Entonces era una ruina a punto de hundirse definitivamente como le ocurrió a otra iglesia, la de Santiago, situada apenas a seiscientos metros de ella y cuyos sillares terminaron sirviendo para restaurar la fachada de la parroquia de Alcuéscar.
Desde 2005 aproximadamente está en servicio el Centro de Interpretación de la basílica de Santa Lucía del Trampal, dependiente de la Consejería de Cultura de la Junta de Extremadura. Es un edificio moderno, dotado de todo lo necesario para atender al cuidado del monumento y a sus visitantes3.
La Casa de la Misericordia pertenece a una institución religiosa dedicada a las Obras de Misericordia tanto espirituales como corporales. En la Casa de Misericordia de Los Hermanos de María y de los Pobres se sigue acogiendo “a los que nadie quiere, desechos humanos, pobres de solemnidad, los más desamparados”. También en la casa hay una parte dedicada a la Pastoral Juvenil, donde se atiende a grupos de jóvenes que vienen a campos de trabajo, convivencias, campamentos etc., amén de los peregrinos que seguimos llamando a su puerta todos los días pidiendo hospitalidad y descanso para nuestro cuerpo y alma.
Los peregrinos disponen de un recinto acondicionado de acogida donde pueden descansar de la dura jornada. Aquellos que lo deseen pueden recibir los Sacramentos, participar en la Oración comunitaria, en la Eucaristía y recibir la Bendición del Peregrino. Todos los días puedes asistir también a la cena comunitaria en compañía de su hospitalero, un peregrino voluntario de la Asociación de Hospitaleros voluntarios del Camino de Santiago.
Los Esclavos de María y de los Pobres es una congregación religiosa de derecho diocesano, fundada por el R. P. Leocadio Galán, en 1939. La obra comenzó en Alcuéscar para "la redención de la masa trabajadora en los ambientes rurales, mediante la práctica más fiel y constante de las Obras de Misericordia, tanto espirituales como corporales".
Su espiritualidad se basa en cuatro pilares: La Iglesia / La Eucaristía / La Virgen / Los Pobres. Su apostolado se centra en la práctica de las Obras de Misericordia en los ambientes rurales: acogida de niños necesitados, personas enfermas, deficientes y ancianos desamparados. También aceptan la titularidad de parroquias a petición de los Obispos y la dirección espiritual de religiosas. Actualmente regentan cinco Casas de Misericordia y cinco parroquias, todas ellas en España4.