ESCUCHA DESDE EL SILENCIO
No huyas de la soledad, no la esquives,
vive sus sensaciones, toma distancia a diario e involúcrate contigo mismo.
Con estos períodos de introspección conseguirás aclarar tu mente,
avivar tus sueños, ahuyentar tus miedos.
Ser peregrino en el Camino de Santiago
es una experiencia maravillosa que fortalece el alma.
Estate presente, sé aquí
Sé abierto y receptivo
a toda la vida que hay a tu alrededor.
A los sonidos, a los olores, a sus colores.
A un sentimiento surgiendo inesperadamente.
Al hormigueo en la barriga.
A una contracción en la garganta.
A la pesadez en la cabeza.
A una vieja tristeza que viene a visitarte.
Mantente curioso mientras el momento danza.
Escucha
Escucha a tu cuerpo.
Escúchate a ti mismo.
Escucha a la otra persona.
Escucha el silencio que hay entre cada frase.
Deja que el silencio se prolongue un poco más. No hay ninguna prisa.
No hay ningún momento 'mejor' que alcanzar.
El silencio no siempre necesita ser llenado.
Anda un poco más desnudo.
Un poco más despacio.
Sabe un poco menos lo que estás a punto de decir.
Estate un poco menos preparado, más abierto al desorden,
un poco más dispuesto a exponer tu vulnerable corazón.
Sorpréndete ante tus propias respuestas.
No te anestesies con las mismas
historias de siempre.
Tropieza si es necesario
Está bien. Estás a salvo.
Permite que tus palabras surjan desde el silencio y a él regresen.
Observa
si estás hablando sólo para evitar el silencio.
Observa
si estás regurgitando una historia que has contado en el pasado.
Observa
si es que estás tratando de impresionar, o ganarte el amor de alguien.
O si estás evitando ser visto como realmente eres.
Amigo, en el silencio entramos realmente en comunión.
La auténtica comprensión está más allá de la mente.
El amor es silencioso; no necesita palabras.
Escucha el silencio; es volcánico.
/ Jeff Foster
1 comentario:
Obrigado.
Muito bom, muito profundo
Bom Caminho
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